CASAS DE ARTISTAS EN SANTIAGO Y...ÁMSTERDAM
ROMÁN PADÍN OTERO
Dos acontecimientos culturales distantes en el espacio pero cercanos en las ideas sirven de evocación para hablar de las casas de los artistas. Uno es el evento que se celebra en Santiago de Compostela llamado Roteiro, dedicado a la creación contemporánea. Y el otro es una exposición de moda que bajo el título La casa de Víctor & Rolf, se celebra en el Barbican Art Gallery de Londres.
Entrar en las casas particulares es una experiencia que se ha empleado como vehículo para transmitir discursos artísticos en diversas ocasiones. La Bienal de Berlín de 2006 abría apartamentos privados y casas de artistas al visitante para presentar la experiencia del arte deslocalizado de museos y salas de exposiciones. En aquella ocasión los pisos y ateliers de la calle Auguststrasse se abrieron mostrando la creación en la intimidad y novedad de espacios no accesibles salvo invitación expresa. La iniciativa fue un éxito.
Conocer los lugares donde los artistas trabajan, ver las salas privadas donde residen personajes públicos siempre ha tenido interés. Es interesante, por ejemplo, conocer el estudio del pintor Sorolla en Madrid, antes su casa hoy un museo, pues sabemos más del modo de vida del genio creador. Además, en este mundo de la información en que nos movemos podemos conocer, por vía de reportajes gráficos, las casas de celebridades como los grandes modistos, o los grandes cantantes y eso es de interés, pues a través de sus objetos y decoraciones, conocemos un poco más del personaje.
Así que si la propuesta es como la del Roteiro en Santiago, el interés es doble, pues tenemos acceso a la obra del artista antes de que salga hacia el museo o la galería y la podemos ver en el lugar donde se ejecuta, que es en muchas ocasiones la propia casa del creador.
En esta edición, son media centena de estudios los que se suman al proyecto de abrir las casas de Santiago al visitante interesado en el arte. Las organizadoras del evento, Reina D'Hoore y María Chenut, han sido capaces de coordinar la puesta a disposición del público de un heterogéneo grupo de artistas para confeccionar con ellos el mapa artístico de la ciudad. Es una ruta de creación viva, pues se accede al arte en su "fragua" cuando todavía huele a trementina, cuando aún hay virutas de madera o trozos de metal.
Pero en el Roteiro se presenta la poliédrica situación del arte contemporáneo, así que junto a la visita a clásicos estudios de pintor o escultor de diversos estilos, se puede también acceder a espacios cíber nuevos o llegarse hasta la nave industrial de Santa Isabel y ver las intervenciones específicas que han hecho los artistas. El Roteiro es la puesta en valor de los latidos artísticos de una ciudad.
La idea de las casas de artista está de moda en Santiago y también en Ámsterdam, ciudad en la que se encuentra la casa y sede central de los modistos Víctor & Rolf. Esta pareja de diseñadores holandeses se ha convertido en centro de todas las miradas desde que hace algo más de una década se adentraron en el mundo del vestido, creando piezas únicas recamadas en pedrerías y recubiertas de grandes lazos, una de sus señas de identidad. Sus perfumes Flowerbomb de mujer y Antidote de hombre están a medio camino entre la creación artística y el objeto de consumo.
Ahora, el museo Barbican de Londres expone bajo el título La casa de Víctor & Rolf una gran retrospectiva con los modelos más señeros de los diseñadores realizados en miniatura. Son modelos llevados por pequeñas muñecas, como si de la "casa de juegos infantiles" se tratara. Son casas de artista llenas de moda desde Holanda y estudios de artista en Santiago, dos propuestas de arte desde el lugar de la creación, la casa-estudio.
Dos acontecimientos culturales distantes en el espacio pero cercanos en las ideas sirven de evocación para hablar de las casas de los artistas. Uno es el evento que se celebra en Santiago de Compostela llamado Roteiro, dedicado a la creación contemporánea. Y el otro es una exposición de moda que bajo el título La casa de Víctor & Rolf, se celebra en el Barbican Art Gallery de Londres.
Entrar en las casas particulares es una experiencia que se ha empleado como vehículo para transmitir discursos artísticos en diversas ocasiones. La Bienal de Berlín de 2006 abría apartamentos privados y casas de artistas al visitante para presentar la experiencia del arte deslocalizado de museos y salas de exposiciones. En aquella ocasión los pisos y ateliers de la calle Auguststrasse se abrieron mostrando la creación en la intimidad y novedad de espacios no accesibles salvo invitación expresa. La iniciativa fue un éxito.
Conocer los lugares donde los artistas trabajan, ver las salas privadas donde residen personajes públicos siempre ha tenido interés. Es interesante, por ejemplo, conocer el estudio del pintor Sorolla en Madrid, antes su casa hoy un museo, pues sabemos más del modo de vida del genio creador. Además, en este mundo de la información en que nos movemos podemos conocer, por vía de reportajes gráficos, las casas de celebridades como los grandes modistos, o los grandes cantantes y eso es de interés, pues a través de sus objetos y decoraciones, conocemos un poco más del personaje.
Así que si la propuesta es como la del Roteiro en Santiago, el interés es doble, pues tenemos acceso a la obra del artista antes de que salga hacia el museo o la galería y la podemos ver en el lugar donde se ejecuta, que es en muchas ocasiones la propia casa del creador.
En esta edición, son media centena de estudios los que se suman al proyecto de abrir las casas de Santiago al visitante interesado en el arte. Las organizadoras del evento, Reina D'Hoore y María Chenut, han sido capaces de coordinar la puesta a disposición del público de un heterogéneo grupo de artistas para confeccionar con ellos el mapa artístico de la ciudad. Es una ruta de creación viva, pues se accede al arte en su "fragua" cuando todavía huele a trementina, cuando aún hay virutas de madera o trozos de metal.
Pero en el Roteiro se presenta la poliédrica situación del arte contemporáneo, así que junto a la visita a clásicos estudios de pintor o escultor de diversos estilos, se puede también acceder a espacios cíber nuevos o llegarse hasta la nave industrial de Santa Isabel y ver las intervenciones específicas que han hecho los artistas. El Roteiro es la puesta en valor de los latidos artísticos de una ciudad.
La idea de las casas de artista está de moda en Santiago y también en Ámsterdam, ciudad en la que se encuentra la casa y sede central de los modistos Víctor & Rolf. Esta pareja de diseñadores holandeses se ha convertido en centro de todas las miradas desde que hace algo más de una década se adentraron en el mundo del vestido, creando piezas únicas recamadas en pedrerías y recubiertas de grandes lazos, una de sus señas de identidad. Sus perfumes Flowerbomb de mujer y Antidote de hombre están a medio camino entre la creación artística y el objeto de consumo.
Ahora, el museo Barbican de Londres expone bajo el título La casa de Víctor & Rolf una gran retrospectiva con los modelos más señeros de los diseñadores realizados en miniatura. Son modelos llevados por pequeñas muñecas, como si de la "casa de juegos infantiles" se tratara. Son casas de artista llenas de moda desde Holanda y estudios de artista en Santiago, dos propuestas de arte desde el lugar de la creación, la casa-estudio.
En Roma with Juan while el correo gallego publicó mon article autour des maisons des artistas.