sábado, 24 de enero de 2009

VOGUE Rocks




VOGUE Rocks
Hasta los primeros días de febrero se expone en el Museo del Traje de Madrid una colección de fotografías sobre las más bellas joyas del mundo. Un catálogo de creaciones fechadas desde los años veinte del pasado siglo hasta nuestros días.
Bajo el título Vogue Rocks, la muestra recoge una gran selección de obras maestras de la fotografía de moda que fueron publicadas por el grupo editor de Vogue, Conde Nast, en las últimas décadas. Se trata de una magnífica ensoñación en torno a las variaciones compositivas con diamantes y otras gemas. Abalorios de valor incalculable a los que Marilyn llamaba "los mejores amigos de una chica".
Collares de inspiración hindú con piedras verdes como peridotos o esmeraldas, combinados con prismas rojos como rubís o turmalinas, comparten espacio con joyas de estilo art decó. Grandes brazaletes con formas surrealistas se mezclan con pendientes que imitan a las flores exóticas como las orquídeas. Grandes anillos cuajados de pequeños brillantes negros u otros tan solo habitados por los llamados ice cubes o brillantes talla esmeralda de muchos quilates, llenan los dedos de las más bellas modelos.
En la exposición se pueden ver fotografías de Cecil Beaton, muy célebre por sus retratos de la Familia Real británica y por sus escenografías para el musical My fair lady, entre otros muchos trabajos. También hay retratos de damas con joyas firmados por Jean ­Loup Sieff, muy conocido por sus retratos de Yves Saint Laurent. Hay instantáneas clásicas de la época del glamur firmadas por Irving Penn o Richard Steichen y otras que se circunscriben en la estética de la cultura de club, firmadas por Terry Richardson. Entre las propuestas estéticas más provocadoras de estos creadores se encuentran los bodegones de joyas sobre cuerpos desnudos o naturalezas muertas, firmados entre otros por Helmut Newton o Steven Meisel. Hay retratos de bellezas de ébano como Naomi Campbell enjoyada para matar. O primeros planos de manos y labios que se muestran opulentamente enjoyados mientras degüellan pollos, cortan carne magra o se entretienen degustando bocados que parecen palpitar envueltos en sangre. Es una forma iconoclasta de mostrar algunas de las más increíbles joyas del mundo sobre los cuerpos de las maniquís más sensuales.
Entre las musas que aparecen en las fotografías se puede hacer un catálogo de los arquetipos de belleza a lo largo del siglo, recorriendo un camino que desemboca en la voluptuosamente bella Mónica Belluci o la andrógina Uma Thurman y que pasa por Charlotte Rampling en los ochenta o María Félix en los años sesenta. La actriz y diva mejicana fue además de una excelente intérprete de papeles inolvidables en el celuloide, una gran amante de las joyas. Para ella se hicieron entre otros los abalorios con forma de serpiente y de lagartos en Cartier, además de otros conjuntos formados por collar con pendientes de inspiración hindú. Entre sus preferidos, los broches con forma de rana de origen chino y las pulseras hechas por Tane con significados autobiográficos que refieren al puma, a la película María Bonita y a su pueblo natal.
En esta exposición vemos a las más bellas mujeres envueltas en los destellos de las rocas más valiosas del planeta. La moda atemporal en clave de joyería.
Román Padín Otero
I´ve published este artículo sobre la exposición de fotografía de joyas que hay en el Museo del Traje de Madrid...all that glitters! En el correo gallego, Stern, Cartier, Harry Winston...give them all to me!!